11 junio 2010

Sex and the Letter g


Esta semana ha sido todo muy sexual. Desde el principio hasta el final.
El martes, fui a ver con dos de mis mejores amigas (mi hermana y mi cuñada) Sex and the City 2.
Creo que en alguna ocasión he hablado en este blog que he visto Sexo en Nueva York (como se llama en España) unas 25 veces, sin exagerar. Soy megafan. Y me encanta Carrie. Mi cuñada me regaló la entrada para el preestreno de la primera peli y la verdad es que nos decepcionó un poco. Nos encontramos con una Carrie muy dramática y no nos quedaron muchas ganas de ver la segunda parte. Pero no podía dejar de ir a verla... por principios. A pesar de las críticas tan negativas que he ido leyendo sobre esta película, a mí me ha gustado mucho. Miranda está muy bien y Samantha es la más divertida como siempre, aunque yo sigo siendo fan de Carrie. Me lo pasé muy bien viéndola, me reí y disfruté de lo que ví. Me encanta ver el despliegue de modelitoss que van apareciendo. Tan guapas ellas. Son como un soplo de aire fresco y de optimismo.

Digo semana sexual además de por Sex and the City 2, porque el jueves celebramos una reunión Tuppersex en mi casa. 11 mujeres, una asesora sexual, dos maletas de juguetitos sexuales (de todas formas, colores, tamaños, sabores, texturas) variaditos y nuestra cuenta del banco vacía.
Sí, vacía. Porque ella pone todo lo que trae encima de la mesa. Y te va contando un poquito para qué sirve todo lo que ha traído. Empieza por la ropa interior, seguimos con los caramelos (sí, caramelos), con los polvos picapica que se extienden por el cuerpo con una borla de plumas y esos polvos se comen... lubricantes, vibradores (increibles, grandes, pequeños, anatómicos), cremas estimuladoras... y nosotras queríamos comprarlo todo... y de hecho lo logramos... Compramos casi todo, tantas cosas, que agotamos todo lo que traía en las maletas...
La empresa con la que organizamos la reunión se llama No es pecado y la asesora es bastante buena. Se llama Sonia. Lo cuento porque la chica se lo curra y te lo va contando todo de maravilla. Es mi segundo tuppersex, pero la gente que va a su primer tuppersex siempre empieza un poco avergonzado pensando que eso no va mucho con su personalidad y que no va a comprar nada... pero no... al final saca la tarjeta de crédito y pierde los papeles comprando un montón de cosas que la verdad son alucinantes.

Esto nos viene fenomenal a todos, hombres y mujeres, tanto si tienen pareja como si no. Estas reuniones se hacen para sorprender, informar, educar o enseñar sobre todas las posibilidades que tenemos en materia sexual para mejorar nuestras relaciones. Para que la monotonía no esté presente en nuestra vida. Hay que esforzarse. Además, puedes tocar, oler y probar cada uno de los productos que se presentan. Yo me lo pasé genial, me reí mucho y compré muchas cosas al igual que mis amigas. Casi siempre se hace con mujeres pero deberían de animarse los hombres y hacer reuniones en grupo con sus amigos.

A ver como terminamos la semana...

Un besito a tod@s y a disfrutar.
g.

1 comentario:

  1. Ay!! La verdad es que lo pasamos bien! Ya pondremos en común qué tal los productillos!
    Besos!

    ResponderEliminar